06 abril 2006

La voz

Esta es la historia de cómo todo cambia de repente, pasa de ser bueno a malo y luego bueno otra vez. Me levanté esta mañana dispuesta a empezar bien el día, al primer toque del despertador ya estaba en pie, desayuno, me visto y recojo la mochila. Después de la temporada Otoño-invierno, hoy voy a volver a coger la bici para ir a clase, llevo varios días pensandolo, pero hoy ya no tengo escusa. Necesito llevarla para poder volver en ella si quiero llegar con tiempo para coger el tren hacia mi casa. Me monto, salgo de casa y empiezo a pedalear, al poco la cadena se sale (misterios de la vida) y no puedo ponerla, porque se ha enganchado con el tornillo del portaequipajes, por suerte estoy cerca de casa y puedo ir a por un destornillador (por dentro me apunto, que no estaría mal, llevar un par de herramientas encima). Llego a casa, abro la puerta, arreglo la bici y... ya llego tarde, por suerte, no creo que pille mucho tráfico con la bici y podré llegar más o menos bien.... Pues no!! Hay un trafico de coj..., por las obras, no hay más lugar que la carretera para circular, asi que tengo que meterle caña y para colmo, con lo de la cadena, me da un tiron... Pero al final llego a clase y no mucho más cansada de lo que normalmente lo hago. Cuando regreso, en el bus escucho a una pareja de habla inglesa hablar, no me entero de nada, pero no puedo dejar de escucharles. Por suerte, están detrás mía y eso hace que no los mire también, no puedo evitarlo. Me he quedado enamorada de la voz del hombre, su perfecto dominio del inglés y su tono grave (no como la mayoría de los ingleses/americanos que he escuchado que tienen voz de pito). Tengo ganas de darme la vuelta y decirle que me encantaría quedar con ellos/con él para hablar un ratico, quizás con una voz así consiga aprender algo de inglés (tiene la voz perfecta), pero no lo hago, me da demasiada vergüenza y probablemente tendría que decirselo en inglés (¡oh, my good!), empiezo a pensar que le diría... Excuse me, i listen us and i... i´d like go out with .... (¿eso era salir, o estar saliendo con alguien?, ufff que follón). El caso es que pensando en mi declaración de voz llego a mi parada, me bajo y durante todo el camino voy buscando las llaves de mi casa, no las encuentro (normal, con todo lo que llevo metido en la mochila: estuche, carpeta, agenda, zumo, dos cucharillas, pañuelos, la navaja, suero para los ojos, la cartera, caramelos,....). Llego a casa con la idea de que me voy a tener que sentar un rato a sacar todo lo que llevo en la mochila y cuando estoy frente a la puerta descubro que mis llaves están ahí, puestas en la cerradura, desde que las dejé esta mañana para arreglar la bici, en ese momento, una sensación entre alegría y miedo se apodera de mi y no se va, hasta que mi abuelo me dice que en casa no ha entrado nadie. Ojalá tampoco hayan hecho copias!!!

Por cierto, para cuando llego a casa, ya he perdido también la llave de allen de la bici (así que aquí acaba mi intento de llevar cosas para arreglar la bici en cualquier lado).

4 comentarios:

Migue dijo...

"y cuando estoy frente a la puerta descubro que mis llaves están ahí, puestas en la cerradura, desde que las dejé esta mañana para arreglar la bici..."

Por menos te dirían que has hecho una "Miguelada" ^^U XDDDDD

Marguita dijo...

Así me gusta, dando ánimos!!

Anónimo dijo...

Es mejor que no hablaras con los ingleses: "me da demasiada vergüenza y probablemente tendría que decirselo en inglés (¡oh, my good!)"

Se dice "oh! my god!"; mejor que no les dijeras nada, o mejor aún, que no les escribieras nada :)

Sigue practicando. :P

Marguita dijo...

Bueno, eso viene por parte de mi primo el americano,digamos que me enseñó a hablar "calorro inglés" y como él dice, "when you go black, you never go back"