15 mayo 2005

En 1 lugar de La Zubia, cuyo camino no quiero olvidarme

Ayer fue el concierto de Fede Comin, y como en las ocasiones anteriores me gusta mucho escucharlo en directo, tiene unas letras preciosas y mucha magia sobre el escenario. Después, nos unimos a más amigos que no vinieron al concierto y nos fuimos para ese la parcela de uno de ellos (mantendremos en el anonimato al sujeto en cuestión). En medio del campo, tras haber pasado no se qué picadero, paramos los coches, y entre higueras y demás frutales (fue el único árbol que distinguí en la noche), descubrí la casa, en realidad es solo una habitación que pronto quedó llena de gente mirandose a la luz de las miles de velas (quizá no tantas) que llenaban el lugar.

Dos guitarras, dos voces y una bateria fueron llenando la habitación de notas, acordes y momentos, de vez en cuando alguna voz por lo bajo, cantaba el estribillo de la canción. Fueron pasando las canciones, las risas y las horas y para cuando llegó el momento de irse. No quería moverme de allí, era la primera vez que había estado con ellos, pero no me sentía extraña, solo deseaba poder volver pronto allí. Quizás el hecho de estar rodeados de árboles, bajo las estrellas, en un lugar donde no se escucha a nadie, me ha hecho, una vez más recordar las noches aquellas y este sea el primer paso para pasar una con ellos.

Quizás, deba robarle unos versos a The Beatles para reflejar esta noche, aquellos versos que pertenencen a una de las canciones que se cantaron alli, aunque puede que si que estas cosas cambien mi mundo:

Images of broken light
which dance before me like a million eyes,
that call me on and on across the universe.

Imágenes de luz vacilante
que bailan frente a mí como un millón de ojos
me llaman y me llaman a través del universo.


[...]
Sounds of laughter
shades of earth are ringing
through my open views
inciting and inviting me
Limitless undying love which shines around me like a million suns,
it calls me on and on across the universe
Sonidos de risas,
sombras de la tierra
vienen a mi mente
incitándome e invitándome
Infinito e inmortal amor que brilla a mi alrededor como un millón de soles
que me llaman y me llaman a través del universo

[...]
Jai guru de va om
nothing's gonna change my world
Jai guru deva a om
Nada va a cambiar mi mundo
    Acroos the Universe

1 comentario:

Anónimo dijo...

Durante casi toda mi adolescencia tube un lugar como ese. Un lugar en el que escuchaba musica rodeado de arboles, contemplando las estrellas en las cálidas noches de verano. Allí no se escuchaba nada solo la música sobre todo porque solamente la escuchaba yo, era el lugar de aislamiento y mi regocijo y algunas veces echaba de menos el estar con amigos con los que poder escuchar esas canciones que me llenaban el corazón y me hacían pensar solamente
en la musica. No pierdas a tus amigos porque esas noches que echaba de menos el estar con alguién eran unas de las mas angustiosas que he vivido.